Quentin Thaddeus Bethley

Nombre y apellidos: Quentin Thaddeus Bethly

Apodo: Quentin

Edad: 18

Banda: Tracker

Tipo de don: Otros

Don: Quentin puede manejar la fortuna a su antojo, la suerte. Desde conseguir inducir la mala suerte a un enemigo y conseguir que tropiece y se tuerza el tobillo hasta hacer que le fallen los frenos del coche y caiga por un precipicio hasta ganar la lotería tres veces seguidas.

Control del don: Su control es negligente, inconsciente y descontrolado. No puede elegir cuando manifestar su poder si no que su don reacciona a su estado de ánimo o influenciado por lo bien o mal que le caiga una persona nada más conocerla.

Descripción Física: Quentin es bajito, mide 1,60 y su cuerpo es fino y casi “escarpado” en el sentido de que sus huesos son muy pronunciados, de hecho su ropa parece estar colgada sobre un montón de huesos cuando la lleva puesta y el hueco hundido en su clavícula remarca su delgadez.

Es albino, tiene el pelo corto y blanco, muy fino y liso, su ojos son de color marrón rojizo y tiene unas marcadas ojeras en torno a ellos de color casi violeta. A la hora de vestir Quentin no tiene estilo definido, suele llevar unos vaqueros ajados, zapatillas y una camiseta de manga larga normal. Es decir, Quentin es absolutamente simple a este respecto. Tiene la columna vertebral muy marcada que queda remarcada en su forma de andar encorvada, como si le hubiesen obligado a andar así durante mucho tiempo y ahora no supiese como enderezarse. Lo que lo hace parecer más bajo aún, no es especialmente flexible y su aspecto es hasta quebradizo, como si no tuviese articulaciones y fuese una pieza única. De hecho, se cansa con mucha facilidad, tiene muy poca resistencia.

Descripción Psicológica: Quentin cree que pasó toda su vida recluido, es por esto que no sabe escribir ni leer, tampoco está muy seguro de saber hablar aunque sí entiende lo que le dicen, es un verdadero sociópata. Quentin no sabe relacionarse con los demás, puede padecer algún tipo de psicopatía ya que no experimenta ningún tipo de remordimiento o aversión ante la visión de la crueldad y el maltrato, no sonríe nunca y a penas parpadea. Una mirada atenta y viva, de ojos muy abiertos y expresión callada y seria es todo lo que reciben sus interlocutores.

Eso sí, el equilibrio emocional de Quentin es voluble e impredecible, insultarle y que él no preste atención o no le importe y al día siguiente percibir que alguien le mira demasiado y atacarle sin aparente motivo. Thaddeus es un desequilibrado mental cuyo objetivo no es más que el de sembrar el caos y divertirse con ello. No tiene piedad, no tiene remordimientos. Es transparente como el agua y no oculta sus intenciones.

Gustos y preferencias: Prefiere los lugares oscuros donde poder ocultarse, más por costumbre que nada y no puede dormir en un colchón. Siempre duerme echado en el suelo.

Miedos y fobias: A Quentin le dan miedo los espacios abiertos, puede resistirlo, pero la verdad es que lo pasa bastante mal. Se podría decir que padece agorafobia.

Manías: Chuparse el pulgar, no mucho más.

Habilidades de combate: Su don no es especialmente combativo, es más bien un complemente. Las habilidades de combate de Quentin son primitivas, su forma de atacar es mordiendo con excesiva brutalidad hasta el punto de ser capaz de arrancar la carne o ayudándose con cualquier objeto punzante de la habitación. Posiblemente su habilidad radica en el hecho de que no tiene miedo a morir, de que no se controla, de que su violencia es brutal y pura.

Historia: Desde que Quentin nació fue considerado gafe, lo cual no estaba tan lejos de la verdad. Fue el primero y único hijo de Alisa y Thaddeus tras nada menos que tres abortos. Eran mayores y supersticiosos cuando le tuvieron. A los pocos días de nacer los padres de Alisa murieron, Thaddeus tuvo un accidente en el trabajo y fue despedido. Y no sólo eso, como una especie de onda expansiva sucedieron pequeños y grandes desastres en todo el vecindario, desde tostadoras averiadas hasta accidentes mortales. Los padres de Quentin tomaron la decisión de acabar con la vida de su hijo cuando Alisa, absolutamente convencida de que su hijo era el origen del problema, casi es aplastada por la puerta del garaje en un extrañísimo accidente.

Cuando Quentin cumplió 16 años sus padres decidieron venderle a una empresa que no se anunciaba precisamente en las páginas amarillas, Black Lion, con el claro objetivo de librarse de él. Sus padres dijeron que Quentin había muerto y tras desaparecer la oleada de mala suerte se redujo considerablemente. Aún cuando Quentin recibió una educación adecuada al llegar a Vanaheim que adquirió con cierta facilidad, tras el Despertar sufrió una fuerte regresión que prácticamente dejó su cerebro en blanco, no sabe hablar bien aunque sí comprende lo que le dicen a duras penas, sólo conoce su propio nombre, ningún otro dato.

El recuerdo falso que le fue implantado fue el de haber pasado toda su vida encerrado. Aunque él no es consciente y considera que todos sus años de encierro fueron absolutamente ciertos, no es capaz de discernir la realidad, Black Lion lo hizo de esta forma, posiblemente curioso por saber cómo se desarrollaría un don bajo extrañas circunstancias, un don aparentemente abstracto que sin duda mostraría su utilidad como una formidable forma de alcanzar las metas más difíciles. El importante factor suerte. La casualidad mueve el Universo.

Pero para la cerrada mente de Quentin su cárcel se esfumó en una voluta de humo y él fue libre. Sin más. Ahora Quentin se ha unido a los Tracker tal vez porque fueron los primeros que se cruzaron en su camino y despertaron una curiosidad inusitada en él. No sabe muy bien lo que es Vanaheim y no le importa en absoluto. Es libre, y es peligroso.

Otros: No sabe cuál es su nombre completo porque nunca nadie lo ha llamado así. Pero sí que lo han llamado “Quentin” y es capaz de reconocerse así mismo como tal. En cuanto a su segundo nombre y apellido los ignora y no le importan lo más mínimo. Quentin no sabe absolutamente nada, no guarda en su cerebro ningún tipo de conocimiento.

Veamos, tu ficha está correcta salvo por una cosa: la historia.

Quizá se te haya pasado al leerlo, pero los Vanir no habéis vivido siempre en la ciudad con vuestros padres. Teníais una vida fuera de ella, hasta que a cierta edad os secuestran, os someten al borrado de recuerdos, y os implantan la proteína que activa vuestro don. Después os meten a vivir con una falsa familia, hasta el momento del despertar.

Por eso Quentin no puede haber vivido toda su vida con sus padres naturales. En algún momento fue separado de ellos y sometido al mismo procedimiento. Se nos ocurre que podría ser que, en su caso, los propios padres se lo vendieran al Black Lion al querer librarse de él, puesto que ya era algo gafe y la proteína lo que hizo fue potenciar mucho más su don.

Para que encaje con lo de desconocer el idioma y la educación (que en Vanaheim sí habría recibido) puedes poner que tras el despertar, el shock de la liberación hizo que su memoria diera un retroceso y olvidará gran parte de los recuerdos, palabras, etc.

Son solo sugerencias, tú puedes adaptar la historia de la forma que creas. El resto está bien, y cabe decir que es un don bastante curioso de ver.

En cuanto edites eso, postea de nuevo y te daremos rango y color.

No hay de qué. Todo correcto.

Bienvenido, cierro.